En el colegio, no era el chaval más inteligente de mi clase, pero a fuerza de voluntad y disciplina lograba sacar buenas notas. Y así ha sido toda la vida: en la universidad, con el entrenamiento, en el trabajo…
La disciplina es el secreto más efectivo que utiliza la gente exitosa.
Ser disciplinado no es nada fácil porque los malos momentos llegan a todas las casas y están ahí para ponernos a prueba. En esas circunstancias lo más sencillo y cómodo es tirar la toalla, eso es lo que hace la gran mayoría. Ser disciplinado no es tener fuerzas para continuar, sino continuar a pesar de no tener fuerzas.
Tú, yo y todos aspiramos a tener éxito en las áreas importantes.
¿Te Imaginas tener un superpoder que construya tu vida ideal?
¿Te imaginas poder entrenar un hábito que te llevará a lograr cualquier cosa que te propongas?
¿Te gustaría poder esculpir tu cuerpo tal y como lo deseas?
¿Te gustaría tener más salud, más energía y ser más feliz?
Estas de suerte, porque ese superpoder lo tenemos dentro de nosotros, está a nuestro alcance, pero solo unos pocos son capaces de dominarlo. Es fácil conocer quién ha logrado dominar ese poder de la disciplina, solo tienes que ver sus resultados. Por normal general son personas más exitosas, abundantes y felices.
La disciplina contiene la misma idea que el efecto mariposa. Realizar pequeñas variaciones en un modelo o sistema predeterminado pueden producir grandes cambios en el futuro del mismo.
La disciplina te permite que con pequeñas acciones puedas conseguir grandes resultados en tu vida. Pequeños pasos constantes, día a día, paso a paso.
La disciplina es una de las claves de las personas con alma de guerrero. ¿Te imaginas un guerrero o superhéroe, tumbado en el sofá dejando escapar sus sueños? ¿Te imaginas una persona de éxito que no toma acción?
Todos tenemos disciplina
Desde pequeños tus padres y tutores te han inculcado disciplina. Aunque aún no haya reflexionado en ello. Responde las siguientes preguntas:
¿Te vistes cada día?
¿Te haces la cama cada día?
¿Te cepillas los dientes antes de ir a dormir?
Si tienes perro ¿lo sacas a la calle varias veces al día?
¿Ayer te duchaste?
¿Te presentas al trabajo a la hora?
¿Cocinas, limpias, friegas, llamas por teléfono, hablas con tus familiares… a diario?
Si la respuesta es sí, tú ya tienes ese superpoder en tu ADN.
Imagina dónde podrías llegar si tomaras la decisión firme de ser disciplinado con ciertas acciones que pueden catapultar tu salud y bienestar hacia tu máximo potencial.
¿Y qué pasa si fallas?
Nada, si fallas un día, no pasa nada. Igual que si hoy no te duchaste, podrás hacerlo en un rato o mañana y tendrás zero remordimientos.
La disciplina es el secreto más efectivo que utiliza la gente exitosa.
Como apunta Raimón Samsó, autor de El poder de la disciplina (Independently published, 2019), la disciplina se convirtió en su única arma secreta para conseguir sus metas. Esta obra te proporciona una visión disruptiva (propia del autor) que puede cambiar tu manera de afrontar los retos y obstáculos de la vida, tal como me pasó a mí.
Para la entrada de hoy, te traigo los mejores aprendizajes (desde mi punto de vista) aplicados desde el enfoque de la salud y el fitness (una de mis pasiones).
Sigue leyendo si quieres saber más sobre:
- Cómo pasar a la acción inmediata.
- Cómo desarrollar hábitos para vivir con más salud.
- Cómo vencer la pereza y la procrastinación.
- Cómo crear hábitos automáticos que te llevarán a los resultados deseados.
¿Mola o no mola el menú del día? 😊
Si no sabes cómo empezar a comer mejor, si no sabes cómo ser un ejemplo para tus hijos, si no sabes aumentar tu masa muscular ni qué ejercicios realizar, si no sabes cómo gestionar y dosificar tu energía. Si has experimentado alguna de estas frustraciones, no estás solo. De hecho, ni siquiera te sales de lo común.
Eres del 95%, pero tranquilo no estás solo.
La disciplina es un hábito sencillo, fácil de implementar y al alcance de todos el mundo si se sabe cómo hacerlo. La disciplina tiene el potencial de cambiar cualquier vida y llevarla al ideal soñado. “Solo” tienes que comprometerte al 100% y pagar el precio necesario. Incluso, ese precio lo pones tú. A mayor precio, más y mejores resultados.
¿Quieres bajar 5 kilos de grasa? Paga su precio!
¿Quieres dejar de padecer ese maldito dolor de espalda? paga su precio!
¿Quieres que te quede más ajustado la camisa que te gusta tanto? Paga su precio!
¿Quieres tener la energía necesaria para llegar a todo? Paga su precio!
Si no estás dispuesto a pagar el precio, no servirá de nada quejarse, envidiar, criticar, juzgar o fustigarte. Seguirás estancado en la línea de salida, mientras ves a otras personas luchar por sus sueños.
Dos preguntas muy poderosas, pero incómodas.
¿Cuántas veces te engañaste a ti mismo, aunque en el fondo de tu ser sabías que tu elección debía ser otra?
¿Vas a esperar a estar enfermo para empezar a cuidarte?
La mayoría queremos un cuerpo fitness, un vientre plano, unos músculos grandes y vigorosos, pero la minoría está dispuesta a pagar el precio. Un precio un varios bonus extra; cómo vivir más, sufrir menos y ser más feliz y abundante.
La verdadera disciplina no se impone, viene del interior de nosotros mismos.
Hay dos tipos de disciplinas: la interna y la externa. La primera tiene que ver con los pensamientos, creencias y sentimientos. La segunda tiene que ver con comportamientos, hábitos y acciones. Trabaja primero en tu yo interior, te facilitará el camino de transformación del yo exterior.
La disciplina es hacer lo que hay que hacer el tiempo que toca hacerlo. Funciona igual que un músculo, si la entrenas crecerá en tamaño y funcionalidad. Pero cuidado, los músculos también necesitan un tiempo de recuperación. Si agotas tu disciplina, estás debilitando también tu fuerza de voluntad.
¿Puedes ser disciplinado en todo?
No, claro que no. Solo en lo que te apasiona, en las prioridades y en lo que amas.
Por lo tanto, entiende que la salud es algo prioritario. Si no pagas hoy el precio de una vida saludable, tendrás que pagar el precio mañana del sedentarismo que te aseguro es mucho más caro y doloroso.
¿Cómo se debilita tu disciplina?
Todos nos topamos con estos obstáculos por el camino, que debilitan la disciplina y la fuerza de voluntad.
- Remordimiento
- Procrastinación
- Miedo
- Pereza
- Impaciencia
- Excusas
- Baja autoestima…
Igual que existe la gravedad, y estamos todos a merced de su influencia (te guste o no). Hay otros principios o leyes universales que rigen el universo. Si sientes cierta resistencia que no te deja avanzar, seguramente sea porque no estás respetando uno (o más) de estos principios.
Los más importantes (bajo mi punto de vista) son los que explica de forma excelente Sergio Fernández en su libro Vivir con abundancia ( Plataforma, 2015): Ley de la creación, todo se crea dos veces (mente y mundo físico); ley de la causa y el efecto; ley del equilibrio; Ley de la acción, etc.
El universo no juzga ni nos debe nada, tú eres el responsable de vencer esos obstáculos. Olvida el « ¿Porqué a mí?» y hazte preguntas inteligentes que empiezan por «¿Cómo puedo superar… ?»
Simplifica: ahorra energía en decisiones triviales y resérvala para las decisiones importantes.
Algunos ejemplos:
- Sigue una dieta en la que sabes que comer cada día.
- Contrata los servicios de un profesional para que te elabore una rutina de entrenamiento personalizada, con valoración y seguimiento.
- Acostarte y levantarte siempre a la misma hora.
- Agendar 20’ diarios de cuidado personal.
Cuando pospones una tarea, entrena el pasar a la acción.
Cuando temas no estar a la altura, entrena la autoestima.
Cuando abandones antes de empezar, entrena la fe.
Cuando dices mañana lo hago, entrena actuar ahora.
Cuando sientes miedo, entrena la valentía y el coraje
Cuando te excuses, entrena el compromiso.
Si no consigues lo que deseas no es por culpa de los obstáculos, sino por falta de compromiso.
⭐️ Lo fácil a corto plazo lleva a una vida difícil a largo plazo.⭐️
⭐️ Lo difícil a corto plazo lleva a una vida fácil a largo plazo.⭐️
La disciplina no puede ser nunca una imposición, debe ser una elección voluntaria.
La fuerza de la disciplina proviene de uno mismo, nunca de fuera (orden). Igual que no puedes imponer que alguien se enamore, tenga sed o sea más fuerte, con la autodisciplina ocurre exactamente lo mismo.
Fíjate que lo que nunca has hecho no puede ser difícil (¿si no lo has hecho nunca cómo sabes que es difícil?). Además, difícil o fácil son palabras relativas (subjetivas).
¿En 10 años querrás una vida fácil o difícil?
🚀 Clave útil: Cambia la palabra difícil por interesante, apasionante o motivante.
La idea es automatizar acciones que te conducirán a resultados predecibles.
Cuando algo está automatizado es más fácil de hacer que de no hacerlo. Así puedes vencer la pereza, el miedo, la procrastinación… de una vez.
Las personas disciplinadas diseñan rutinas en su agenda. Con el tiempo, acaban haciéndolas sin pensar. Por ejemplo, seguro que ya tienes entrenado el hábito de lavarte los dientes antes de irme a dormir. Ya es casi inconsciente. Nunca más te dio pereza porque está automatizado. Otro ejemplo, esta vez personal; tengo programado el hábito de entrenar después de trabajar (de 17:00 a 18:30).
Un hábito requiere de atención y trabajo duro al principio mientras se construye, pero una vez establecido, es sencillo que funcione. Es otro principio universal. Tu coche gasta la mayor parte de gasolina en las primeras marchas. Un cohete consume la mitad del combustible en el despegue o igual pasa con el efecto “bola de nieve”. Construye nuevos hábitos y ellos construirán una nueva vida para ti.
La disciplina eres tú mismo. Eres disciplinado en todo lo que te interesa, e indisciplinado en lo que no te interesa, tal y como debe ser.
Por tanto, la clave radica en tres simples pasos:
- Debes amar el resultado (efecto)
- Entender y enamorarte de las causas (para lograr ese resultado).
- Ser disciplinado, ponerle pasión y ser paciente para automatizarlo.
Si amas el efecto, estás soñando. Si amas las causas, acabarás triunfando.
Ejemplo práctico:
Un papá (1) le dice a otro papá (2): “lo que daría todo por tener tu cuerpo, macho”. A lo que el papá (2) responde: “1 hora de entrenamiento de fuerza diaria durante varios años te separan de conseguirlo”.
Conclusión: El papá (1) se enamoró de los efectos, no de las causas.
Crea un hábito con las causas, hazlo automático y olvídate del resto. Viaja en piloto automático y llegarás a cualquier destino que te propongas.
Las personas que se aman a sí mismas de verdad (autoestima) son disciplinadas. Si hoy falla, no se preocupa en exceso porque sabe que mañana no fallará o lo hará más tarde.
Una persona que no se quiere, y quizá ni lo sabe, se niega a sus sueños al renunciar a la disciplina. Sin embargo, una persona que sí se quiere está comprometida a darse lo que desea, y sabe que el vehículo para conseguirlo es la autodisciplina.
Dos grandes grupos de personas: los “ganadores”, gente que se quiere y los “zombies”, gente que no se quiere, que tienen instalados en la mente programas obsoletos y un software desfasado. Tú debes saber en qué grupo estás o quieres estar. Es una elección. Asume tu responsabilidad. El mejor método para perseverar en un camino es disfrutarlo.
Tú eres tu peor enemigo.
Te autoestafa diciendo: voy a esperar a un “momento mejor” o a “estar listo”. Las dudas son el beso de la muerte, una expresión del miedo. Nublan tu mente y frenan la acción. Ahora mismo es el momento perfecto para empezar.
Método acelerado de alto impacto = ponte en aprietos, exprímete
¿Cómo? Varias propuestas para turbo acelerar tus resultados de salud y fitness:
- Paga por adelantado 1 año de gimnasio, y si es premium (caro) mejor. Más resistencia para abandonar y mejor contexto.
- Hazlo público tu compromiso.
- Rétate con alguien, y pon un suculento premio final.
Cuando te miras al espejo te enfrentas a la persona que creará más resistencias a lo que quieres. Cuando vences la partida interna, la externa está casi ganada.
Una acción disciplinada puede tomarte unos poco minutos al día (por ejemplo, 20 flexiones o 10’ de lectura), pero tiene el potencial de transformar tu vida en el medio y largo plazo. Recuerda, estamos diseñados para ser exitosos, abundantes y felices.
1️⃣ La disciplina es ser discípulo de una idea.
2️⃣ La disciplina se entrena como un músculo.
3️⃣ La disciplina es la máxima prueba de autoestima.
4️⃣ El poder de la disciplina implica energía ilimitada para concluir cualquier tarea.
5️⃣ Ahora mismo es el momento perfecto para empezar.
6️⃣ El único camino viable es “el camino del corazón”.
7️⃣ El ego es el único obstáculo.
8️⃣ Disciplina no es más trabajo, es más resultados.
9️⃣ Cuando descubres lo que te da la disciplina, no te supone ningún esfuerzo aplicarte a ella.
🔟 Todo deseo lleva adheridos unos hábitos: descúbrelos, implántalos y replícalos con disciplina.
La autodisciplina se fortalece como un músculo. Úsalo a diario y recupérate el fin de semana, y desarrollarás el SuperPoder interior de los campeones.
Entra en el circulo virtuoso: cuando eres disciplinado en un área de tu vida, es más sencillo serlo en otras áreas. Cada excusa tiene un antídoto y cada obstáculo una oportunidad para crecer.
Confío que este artículo sobre el poder de la disciplina te ayude a alcanzar tu mejor versión de ti mismo.
!Gracias Por Leerme!
Un fuerte abrazo virtual,